Sabela y Fran son esa pareja que a todos los fotógrafos de boda nos gusta tener. Amables, sinceros, algo tímidos para las fotos, pero siempre dispuestos a ayudarte en tu trabajo.

Nos conocimos en la boda de unos amigos suyos en la que yo fui el fotógrafo (Gracias Marian y Diego por darles mi teléfono).

Ya habíamos hecho una sesión de fotos de preboda con sus perretes (os recomiendo verla si no la habéis visto ya), así que ya sabían como trabajo, que no me gustan las fotos demasiado posadas ni rígidas y que lo que quiero siempre es que sean ellos mismos. 

Fue una boda íntima en un restaurante y casa rural de unos amigos suyos en Carral (A Coruña) (Casa rural Costa da Egoa) y cuando digo íntima no lo digo porque fueran pocos invitados, sino porque todos los que había tenían que estar, y eso se nota.

Una boda distinta, muy gallega, emotiva, natural. 

Ellos, como siempre, emocionados cada vez que se miraban o se rozaban.

Hacía demasiado sol durante la ceremonia pero a parte de eso todo fue perfecto.

Aprovechamos unos minutos para hacerles unas fotos en el sendero por donde pasa el río, una ruta de muíños preciosa. Tuvimos que bajar un tramo un poco escarpado, pero iban bien preparados con sus zocas de EFerro, una marca gallega que ha elevado el concepto de las zocas a nivel de pasarela de moda.

La verdad es que mereció la pena el descenso, en diez minutos tuvimos unas fotos preciosas en medio del bosque, con el río y los helechos.

Muchas gracias pareja por permitirme contar vuestra historia.

Jesús Sancho, fotógrafo de Boda en Galicia